A lo que llamamos salvaje, a menudo peyorativamente, los pueblos indígenas lo entienden como una integración profunda con el medio ambiente. «Traemos este conocimiento a lo largo de nuestra historia», dice Sonia Guajajara, una de las más importantes líderes indígenas. «Para nosotros, la vida es inseparable de la naturaleza».

Nacida en Maranhão, Soninha, como es conocida, está al frente de Articulação dos Povos Indígenas do Brasil (Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil) y gana cada vez más espacio en la defensa de los derechos de los indios. ¿Quién no la ha visto dominando el escenario de Rock in Rio 2017, invitada por la cantante norteamericana Alicia Keys para enviar un mensaje sobre la protección de la Amazonia?

Para ella, se puede salvar el planeta hoy mismo – «no tienes que esperar el apocalipsis para volver a vivir», afirma. Y, mejor aún, con la ayuda de los indios. En la siguiente entrevista, Soninha le cuenta a Believe.Earth por qué los pueblos indígenas son una defensa contra el caos y cómo actuar para preservar la vida. La suya, la nuestra, la del planeta.

Believe.Earth (BE) – ¿Por qué las personas tienen dificultad para conectarse con la naturaleza?
Sonia Guajajara (SG) – Nunca es bueno generalizar, pero la sociedad, como se moldeó  hoy en día, creó esta desconexión. La esencia de los pueblos indígenas es la colectividad, la relación respetuosa con la naturaleza y la ancestralidad. Valoramos la pertenencia a un pueblo.  

Incluso con 500 años de contacto con el hombre blanco, seguimos manteniendo una resistencia gigante: disfrutar sin destruir es una de nuestras principales huellas. Queremos a la naturaleza viva para que podamos también tener vida.

Pero el que no es indio, generalmente no puede ver la naturaleza como parte de sí. Quieren derribar, producir, cambiar paisajes y terminan desarrollando una necesidad muy grande con las relaciones de consumo. Necesitan tener más coches, mucha ropa de moda, un buen trabajo, estatus. La identidad individual es el modelo que adoptan. La falta de una identidad colectiva deja un vacío en sus vidas.

Esta sed de consumo hace que la gente se aleje de sí. Siempre necesitan agradar a alguien y seguir normas y terminan teniendo valores sin principios. En la ciudad, mientras los residentes se quejan de la contaminación, ellos siguen contaminando. Hablar mal del tráfico y no dejan de comprar coches. Trabajan todo el tiempo para satisfacer lo individual en detrimento de lo colectivo. Entre nosotros, es el espíritu colectivo el que prevalece. Luchamos por la tierra, pero nadie lucha por tener un pedazo de tierra para sí mismo.

BE – ¿Cuál es el impacto de la devastación del verde en la vida de los indios?
SG – Cuando se destruye la naturaleza y se hace inviable el modo de vida de los pueblos indígenas, impidiendo que ejerzan su cultura, están matando a estas personas. Si no seguimos nuestra cultura, nuestra tradición, dejamos de ser un pueblo.

La foto muestra a Sonia (descrita en la foto anterior) con un semblante feliz tocando un ramo de flores.

Sonia y la conexión con la naturaleza: “no vale tener dinero si no hay agua” (Alan Azevedo/Believe.Earth)

BE – ¿Cómo los pueblos indígenas nos pueden ayudar a salvar el planeta?
SG – Haciendo que la gente se de cuenta cuenta de que no tenemos que esperar el apocalipsis con el fin de volver a vivir. ¿Conoces el cuento del pescador indio? Ese en donde hay un indio pescando a la orilla del río y llega un blanco y dice: «hombre, tú atrapas mucho pescado. Tenemos que vender aquí, hacer un montón de dinero para comprar un barco, ganar todavía más, comprar más barcos para alquilar para que los otros pesquen por nosotros. Y así podremos quedarnos tranquilos aquí, solo pescando». ¿Y el indio responde: «pero voy a hacer todo esto para qué? Ya estoy pescando aquí tranquilo». Ay, me encanta [risas]. Para mí, esta historia lo dice todo.  

Nosotros, los indígenas, queremos también cambiar de vida, pero ¿qué significa esto para nosotros? Significa tener demarcada la tierra y agua limpia en el río, ser capaces de producir alimentos en la tierra para comer sin preocuparse de los excedentes. Aquí afuera [en la ciudad], no vives pensando en el hoy. Parece que aquí no hay presente.

La foto muestra a Sonia Guajajara con el rostro pintado y usando cocar, con otros 7 indígenas, entre adultos y niños, también usando cocer y con el rostro pintado. Ellos están con los brazos entrelazados en una fila horizontal y caminando en una carretera asfaltada.

Sonia Guajajara conforma la primera línea de la primera marcha por los derechos indígenas del Acampamento Terra Livre 2016 (Campamento Tierra Libre 2016) (Alan Azevedo/Believe.Earth)

BE – ¿Cómo su trabajo al frente de la APIB se refleja en la sociedad?
SG – Tengo la misión de que la gente vea el potencial gigante que los pueblos indígenas tienen para preservar la vida. Y también cómo nuestra forma de vida naturalmente actúa como un barrera protectora contra el caos. El mundo nos necesita, porque lo que hacemos contiene toda esta toda ola de desastre y destrucción que se acerca.

Queremos ser reconocidos como personas que pagan todos los días hasta con su vida enfrentando a las balas, gas pimienta, policía y agricultores. Es una lucha de todos, por la naturaleza y la vida – de la gente y del planeta.

Cuando se comparan las tierras indígenas, con las demás, públicas [áreas protegidas], se ve que las indígenas son los más preservadas. ¿Esto sucede porque hay política de protección? No. Eso es porque los indios están ahí, protegiéndolas. Si no estuviésemos allí, iba a reventar todo. Somos una barrera contra el caos.

BE – ¿Qué nos falta comprender en relación a los pueblos indígenas?
SG – Cuando, nosotros, indígenas, hablamos de la naturaleza, piensan que es algo primitivo y salvaje. Creen que el indio tiene que estar allí en el bosque, y si se va de allí, dejar de ser indio. Pero es el pensamiento de la gente el que es primitivo en relación con los pueblos indígenas. Lo que creen que es ser salvaje, para nosotros es preservar la vida. Pocas personas entienden – o quieren entender – que todo está conectado y que la naturaleza proporciona todo. No vale tener dinero si no hay agua.

Para nosotros, civilización es el comportamiento que tenemos en relación a la tierra. Para los no indios, es el desarrollo, progreso. Es una inversión de comprensión. Para mí, somos el pueblo más civilizado que existe.

 Mi preocupación es que la gente siga con esta ignorancia de pensar que indio es esa figura aislada que vive sin ningún contacto. Existen indígenas aislados, a los que llamamos «pueblos autónomos» y aquí desde afuera luchamos por ellos. Pero hay pueblos con 400 años de contacto, como es mi caso, Guajajara. Sin embargo, vivimos en la misma situación que los demás, de invisibilidad. Hay también pueblos indígenas en contexto urbano, sin entender dónde insertarse, porque las personas piensan que no deberían estar en la ciudad.

Siendo un país originalmente indígena, Brasil ya ha tardado mucho tiempo para superar la ignorancia de no percibir la existencia indígena, de no respetar esa presencia y de mirar sin ver. No se puede pensar más en el indio de una manera romántica, salvaje. Nosotros existimos.