Compasión por los animales y deseo de adoptar un estilo de vida que no dañe el planeta son dos razones que llevan a muchas personas a dejar de comer carne. O entonces a disminuir su consumo, como incentiva Meat Free Monday (Lunes sin carne, en traducción libre). Creada en 2009 por el ex Beatle Paul McCartney, vegetariano por más de 40 años, la campaña anima a la gente a pasar al menos un día a la semana sin carne, pollo, pescado y compañía.

La producción de carne tiene un gran peso en el agravamiento del efecto invernadero. Durante la digestión, bueyes, vacas y otros rumiantes producen grandes cantidades de gas metano, 21 veces más dañino para la atmósfera que el dióxido de carbono.

Una investigaciónt realizada por la Universidad de Oxford en el Reino Unido, indica que, si todo el planeta consumiese un máximo de 300 gramos de carne roja por semana – cantidad recomendada por el Fondo Mundial para la Investigación del Cáncer, una organización que reúne a expertos de todo el mundo en la lucha contra la enfermedad – habría una potencial reducción del 29% en las emisiones de sustancias causantes del calentamiento global hasta el año 2050.

Si la población adoptara una dieta ovolactovegetariana (sin consumo de carne, pero con huevos, leche y productos lácteos en el menú), la reducción alcanzaría el 60%. Si fueran todos veganos, dieta que no admite ningún alimento ni producto de origen animal, la caída llegaría a un 69%. En Brasil, la baja de las emisiones sería del 78% con el vegetarianismo y 84% con el veganismo.

Estos escenarios son hipotéticos, por supuesto, pero sirven para mostrar cómo las opciones de cada uno en la mesa tienen impacto global. «El mensaje principal de este estudio es que las dietas con menos carne y más verduras pueden traer beneficios al medio ambiente y la salud», dice, en una entrevista a Believe.Earth, Marco Springmann, responsable de análisis e investigador sénior de sostenibilidad y salud pública de la Universidad de Oxford.

Menos carne en la alimentación – conoce cuál es la emisión de dióxido de carbono para cada tipo de dieta. Producción en promedio de gases del efecto invernadero por tipo de dieta para 2000 calorías consumidas. El consumo en promedio en Brasil se estima en 2040 calorías por dia (IBGE/ Encuesta de Gastos y Ingresos Del Hogar 2008/2009). Alto consumo de carne – más que 100g/día: 7,19kg/CO2 eq; Consumo intermedio de carne – entre 50 y 99g/día: 5,63kg/CO2 eq; Bajo consumo de carne – menos que 50g/día: 4,67kg/CO2 eq; Pescetarianismo: 3,91kg/CO2 eq; Ovolactovegetarianismo: 3,81kg/CO2 eq; Veganismo: 2,89kg/CO2 eq. Fuente: estudio Dietary greenhouse gas emissions of meat-eaters, fish-eaters, vegetarians and vegans in the UK, realizado en 2014 en el Reino Unido. La investigación tiene como base la realidad britânica, pero sierve como referencia para otras nacionalidades. Arte: Bruno Gomes de Andrade / Believe.Earth.

OPCIONES SALUDABLES
Quien piensa en adoptar alguna forma de vegetarianismo o veganismo suele tener dudas acerca de cómo hacer esto sin poner en riesgo su salud. «Pensar que algunas personas deben necesariamente comer carne es un mito», afirma el médico gastroenterólogo y nutriólogo Dan Waitzberg Linetzky, del Hospital Santa Catarina, São Paulo. «El hecho es que el cuerpo necesita aminoácidos, que están más concentrados en alimentos de origen animal, pero pueden ser proporcionados por diversas fuentes alimenticias». Los aminoácidos son moléculas fundamentales en la formación de proteína.

Los ovolactovegetarianos tienen más facilidad de incluir en el menú opciones que contemplen los nutrientes necesarios. En el caso de los vegetarianos estrictos deben  tener algunos cuidados. «Para este grupo, la vitamina B12, por ejemplo, debe ser suplida con supervisión médica, ya que sólo se encuentra en fuentes animales», dice el profesor Ligiana Pires Corona, del Laboratorio de Epidemiología Nutricional de la Universidad Estatal de Campinas (Unicamp) en São Paulo.

«El hierro y calcio, aunque no sean exclusivamente ofrecidos en alimentos animales, tienen como principales fuentes la carne roja y los productos lácteos, respectivamente. Así que estos nutrientes deben ser fortalecidos con un alto consumo de verduras», agrega Ligiana. Según Dan Waitzberg, del Hospital Santa Catarina, ancianos, niños y atletas de alto rendimiento que adoptan el vegetarianismo siempre requieren supervisión médica.

Menú para el cambio – haciendo un seguimiento con un médico o nutricionista, ye que la dieta debe satisfacer las necesidades inidivduales, se puede reemplazar la carne por verduras. 64g o 1 unidad de bife a la plancha puede ser sustituido por 168g o 7 cucharas de sopa de lentejas cocidas; 80g o 4 pedazos pequeños de carne cocida puedem ser sustituidos por 126g o 5,25 cucharas de sopa de garbanzo cocido; 63g o 3,25 cucharas de sopa de carne picada rehogada puedem ser sustituidos por 150,5g o 5,25 cucharas de sopa de soja cocida (granos); 92g o 2 unidades de brochette de carne puedem ser sustituidos por 175g o 7 cucharas de sopa de frijoles cocidos (granos); 100g o 1 unidad de pollo, filete a la plancha puedem ser sustituidos por 253,7g o 8,75 cucharas de sopa de arveja seca cocida; 60g o 1,5 unidad de hot dog puedem ser sustituidos por 168g o 5,25 cucharas de sopa de frijoles blancos cocidos. Fuente: Sociedad Vegetariana Brasilera. Arte: Bruno Gomes de Andrade / Believe.Earth.

Para reducir o prohibir el consumo de carne, no hay reglas, ni recetas. «El que tiene menos restricciones en la dieta y es más propenso a consumir todo tipo de vegetales tiende a encontrar más facilidad de cambio», dice la nutricionista Paula Gandin, consejera de la Sociedad Vegetariana Brasilera (SVB).

Y el simple hecho de excluir los filetes del plato no es ninguna garantía de mejora en la calidad de la alimentación. «No sirve sacar la carne del menú y compensar sólo con alimentos ricos en carbohidratos como pan y papa», afirma la nutricionista Alessandra Luglio, directora del SVB. «La adopción del vegetarianismo es el momento para mejorar una dieta que hasta el momento estaba equivocada». Y entender que, más que una elección personal, el cambio puede contribuir a mejorar el planeta entero.

PARA SABER MÁS

  • Lee la versión completa de la  Guía de iniciación para una dieta vegetariana (Physicians Committee for Responsible Medicine).
  • Conoce aquí (en inglés) la postura de la Sociedad Dietética Americana sobre vegetarianismo.
  • Cliquea aquí para leer el documento original (en inglés) sobre la investigación de la Universidad de Oxford en Inglaterra, sobre dietas y emisiones de gases del efecto invernadero.